Por Veronica Marquez
Mi madre que estudiò en la U me contaba que el Lic. Marrero era políglota y fue religioso marista o salesiano. No lo recuerdo bien.
Cuando veo al Maestro Marrero, Maestro de maestros, no puedo ocultar mi admiración a quien por tantos años a dedicado a la enseñanza de muchas generaciones salvadoreñas. Un maestro de verdad es el que predica con el ejemlo, y a este Licenciado siempre lo veo en los pasillos feliz, disponible en cualquier momento, simpático.
Según leo por ahí, es Miembro Fundador de nuestra Universidad, algo que merece, al menos, un libro, o una estatua, o el nombre de un edificio, cuando menos.
Me enorgullece saber que este señor fue galardonado hace poco con el premio al Humanista Salvadoreño por permanecer 35 años consecutivos dentro del Colegio de Humanistas de El Salvador.
Felicidades Maestro
Mi madre que estudiò en la U me contaba que el Lic. Marrero era políglota y fue religioso marista o salesiano. No lo recuerdo bien.
Cuando veo al Maestro Marrero, Maestro de maestros, no puedo ocultar mi admiración a quien por tantos años a dedicado a la enseñanza de muchas generaciones salvadoreñas. Un maestro de verdad es el que predica con el ejemlo, y a este Licenciado siempre lo veo en los pasillos feliz, disponible en cualquier momento, simpático.
Según leo por ahí, es Miembro Fundador de nuestra Universidad, algo que merece, al menos, un libro, o una estatua, o el nombre de un edificio, cuando menos.
Me enorgullece saber que este señor fue galardonado hace poco con el premio al Humanista Salvadoreño por permanecer 35 años consecutivos dentro del Colegio de Humanistas de El Salvador.
Felicidades Maestro
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